Como reza el viejo dicho “La basura de un hombre, es el tesoro de otro”, y parece que para Edouard Martinet un artista proveniente de Le Mans, Francia, este refrán se ha convertido en realidad.
Eduard se dedica a transformar objetos cotidianos que encuentra en mercados de pulgas y deshuesaderos de autos en verdaderas obras de arte, sin utilizar soldadura alguna.
Para la realización de cada obra es necesaria la elaboración de varios bocetos para tomar como referencia, ya que sus principales esculturas suelen ser aves, peces o insectos que realiza con gran detalle. Pueden ver más ejemplos de su gran ingenio después del salto.
Si desean ver más de estas fabulosas esculturas pueden hacerlo acá.