Según el protocolo, cuando suena el himno nacional de Reino Unido todos deben escucharlo en silencio en honor a la Reina de Inglaterra, lo que provocó que las palabras de Obama fueran ignoradas por ésta, dejándolo prácticamente con la copa levantada en el aire.
La verdad no sé si este error fue culpa del presidente estadounidense o de la orquesta, pues Obama ya había comenzado con su discurso cuando los músicos comienzan con la interpretación, pero puedo asegurarles que esta es una de las situaciones más embarazosas que en las que se ha encontrado el presidente Barack Obama. 🙂