Los empleados del acuario Oberhausen ubicado en Alemania han decidido erigir este curioso monumento en honor al personaje más prominente de la Copa Mundial de Fútbol celebrada el año pasado, el Pulpo Paul.
La estatua está hecho completamente de plástico, mide más de dos metros de altura, y en ella se puede ver al Pulpo Paul alrededor de un balón de fútbol que tiene las banderas de todos los países que participaron en el torneo. Esperemos que el querido cefalópodo pueda verla desde cualquier lugar donde se encuentre. 🙂
Visto en: Ovación Digital